LUNDU, Centro de Estudios y Promoción Afroperuanos saluda la iniciativa de la Comisión de Pueblos del Congreso que propone la incorporación del Día de la Mujer Afroperuana en el calendario cívico nacional, iniciativa de la congresista Arlette Contreras en conjunto con la Mesa de Trabajo de la Mujer Afroperuana del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.
Esta propuesta, que espera su aprobación del pleno del Congreso, es un paso certero del Estado Peruano para reconocer el aporte de las mujeres afroperuanas en los ámbitos políticos, científicos, culturales y en las innumerables dimensiones en las que ellas hemos aportado a la construcción de la sociedad peruana.
Desde el año 2001 y con una perspectiva feminista que alzó la voz sobre la intersección del racismo y sexismo en la sociedad peruana, LUNDU ha propuesto dos caminos paralelos, diferenciados e interpendientes. Estos son, por un lado las acciones afirmativas, celebratorias y positivas que permitan que la población afroperuana pueda ejercer una vida plena en comunidad y en relaciones interculturales. Como las campañas "Apúntate contra el racismo", "Lleva las cuentas, trenza la historia" o la investigación "Rostros de violencia, rostros de poder" sobre mujeres afroperuanas.
De otro lado, la creación o modificación de la legislación peruana, desde la propuesta de la incorporación de la injuria racista en el Código Penal, la sanción del racismo en los delitos de alta tecnología, la incorporación del insulto racista como categoría de violencia sicológica en los Centro de Emergencia Mujer, hasta las demandas en tribunales de medios para remover programas de televisión racistamente nefastos como el Negro Mama y La Paisana Jacinta e investigaciones como el Observatorio Afroperuano que analizó las representaciones de la población afroperuana y afrodescendiente en más de 11,000 ediciones de diarios, spots y programas de televisión.
Es decir, estamos convencidas que mientras las organizaciones y el Estado, reconocen, valoran y educan, también deben crear sistemas que apuntan a generar cambios estructurales que puedan ser eventualmente disfrutados por las generaciones presentes, venideras y que repare la memoria de quienes murieron luego de vivir una vida impregnada por el racismo, sexismo y exclusión.
Mientras esperamos los años o décadas de los cambios educativos y de generación de conciencia, se deben crear condiciones para que las personas afroperuanas puedan disfrutar de una vida en plenitud sin la violencia racista y sexista.
Saludamos a los movimientos afroestadounidenses que han inspirado a los pueblos afroperuanos desde varias generaciones y que ahora están influenciando positivamente en este cambio de mentalidades.
Saludamos la decisión de la empresa ALICORP en proponer la eliminación de la marca Negrita, asociada a estereotipos racistas y sexistas y que ha sido usado para el bullying racista y sexista en los colegios y en otros espacios de la sociedad.
Saludamos a la Mesa de Trabajo Afroperuana del Congreso de la República y a la congresista Arlette Contreras por su compromiso con las mujeres afroperuanas y por el proyecto de Ley 5493 contra el racismo y discriminación racial que tendría un efecto transversal en el país.
Saludamos también al Ministerio de Cultura y el Poder Ejecutivo por proponer una Ley para prevenir y sancionar el racismo y la discriminación racial que aportaría a generar bases estructurales hacia un país diferente.
Saludamos finalmente a las mujeres, hombres y personas lesbianas, gays, transgéneros, intersexuales, bisexuales afroperuanas, a los movimientos feministas e indígenas y a los colectivos antirracistas que han acompañado o liderado estos cambios desde sus organizaciones políticas, colectivos culturales, familias y espacios cotidianos donde se han ido generando conversaciones y propuestas para avanzar hacia este inicio cambio de conciencias.
Estamos en tiempos de cambios. La historia de los afrodescendientes en el mundo ha tomado un nuevo rumbo. En este Decenio Internacional de los Afrodescendientes estamos expectantes de los que nos depara el futuro con alegría, y de saber que este Bicentenario llegará con cambios trascendentales de los cuales los pueblos afroperuanos seremos protagonistas gracias a la lucha de los movimientos afroperuanos y a las alianzas con otros movimientos, colectivos y decisores de políticas públicas comprometidos con cambios estructurales positivos en la sociedad.